Recetas de Pizzas

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Riquísima receta de pizza cuatro estaciones

La pizza cuatro estaciones es un acierto de la cultura gastronómica italiana. Realmente, si tienes invitados, es la mejor pizza que puedes preparar ya que como lleva ingredientes muy diferentes, nadie se quejará porque alguno no le gusta.

Además, es super fácil de hacer y conseguir los ingredientes que necesitamos tampoco nos costará mucho dinero. Otro punto a favor de esta pizza es que, como siempre, podéis echarle imaginación y cambiar los ingredientes que os proponemos por otros que os gusten más.

Ingredientes para una pizza cuatro estaciones:

  • Para la masa de la pizza:
    • 1 kg de harina de fuerza
    • 600 ml de agua templada
    • 50 gr de levadura de cerveza
    • 30 gr de sal
    • 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
    • 2 cucharaditas de azúcar
  • 1 bote de tomate natural triturado
  • 300 g de mozzarella
  • 150 g de champiñones
  • 150 g de jamón de york
  • 100 g de aceitunas negras
  • 150 g de alcachofa
  • Pimienta negra
  • Aceite de oliva
  • Orégano
  • Sal

Lo primero que tenemos que hacer es preparar la masa de nuestra futura pizza cuatro estaciones. Para esto tendremos que mezclar el agua templada con la harina, la levadura de cerveza, la sal, el aceite de oliva y las dos cucharaditas de azúcar. Amasamos, dejamos resposar y listo.

Si queréis ver más detenidamente la receta para hacer masa de pizza casera solo tenéis que hacer clic en este otro post.

Cuando tengamos lista nuestra masa (o si la hemos comprado en el super) la estiramos un poquito encima de un papel especial y lo colocamos encima de la bandeja del horno.

Lo primero que tenemos hacer es precalentar el horno a 250º para darle una primera hornada a la masa. Añadimos un poco del tomate triturado encima de la base de la pizza y lo extendemos con ayuda de una cuchara; incorporamos aquí un poquito de sal y pimienta, un chorrito de aceite de oliva y orégano al gusto.

Horneamos la masa durante 10 minutos y, cuando hayan pasado, la sacamos para agregar los ingredientes. Eso sí, es muy importante no apagar el horno para que no se pierda la temperatura.

Después de esto, cortamos la mozzarella en rodajas y la colocamos repartida uniformemente por toda la base. A partir de aquí, tendremos que imaginarnos que nuestra pizza ya está dividida en cuatro porciones.

En el primer cuarto de nuestra pizza, cortamos el jamón de york y lo distribuimos. En el segundo cuarto, haremos lo mismo pero con las aceitunas negras. En el tercero con la alcachofa (os recomiendo que la compréis ya cocida) y, por último, en el cuarto colocaremos los champiñones laminados.

Introducimos la pizza en el horno, bajamos la temperatura a 220º y dejamos que se cocine durante 15 minutos más. Cuando esté lista, la sacamos, la troceamos y la servimos.

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Riquísima receta de pizza cuatro quesos

La pizza cuatro quesospizza quattro formaggi en italiano es una de las pizzas por excelencia de la tradición culinaria italiana.

Su base está compuesta, como bien indica su nombre, por cuatro quesos; podemos escoger los cuatro quesos que más nos gusten o hacer la receta original italiana.

Hoy os traemos la receta clásica que se elabora en Italia para que podáis hacer una pizza original y auténtica… ¡quedaréis como auténticos chefs italianos!

La pizza de hoy la elaboraremos con mozzarella, gorgonzola, parmesano y provolone picante. Sin embargo, si os es difícil encontrar alguno de estos ingredientes en el supermercado siempre podéis sustituirlos por cualquier otro queso que os guste: gouda, emmental, ricotta…

Ingredientes para 4 personas:

  • Para la masa:
    • 600 ml de agua templada
    • 1 kg de harina de fuerza
    • 50 gr de levadura de cerveza
    • 30 gr de sal
    • 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
    • 2 cucharaditas de azúcar
  • 1 mozzarella
  • Gorgonzola (también podéis usar queso azul o roquefort)
  • Provolone (picante)
  • Queso Parmesano rallado
  • Tomate natural triturado
  • Sal
  • Orégano
  • Aceite de oliva virgen extra

Lo primero que debemos hacer es preparar la masa que servirá de base para nuestra pizza cuatro quesos. Para esto necesitamos mezclar la harina, el agua, la levadura de cerveza, la sal, el aceite y las dos cucharaditas de azúcar.

Amasamos con las manos hasta que quede una masa uniforme. La estiramos y la colocamos sobre la bandeja, encima de un papel especial para horno. Si es la primera vez que hacéis esta masa podéis consultar la receta completa de masa de pizza en este otro post.

Una vez colocada la masa nos metemos de lleno en la colocación de los ingredientes. Primero, para unir la masa con los quesos echamos tres o cuatro cucharadas del tomate natural triturado.

Añadimos una pizca de sal, un chorrito de aceite y esparcimos un poco de orégano. A continuación tenemos que ir colocando los quesos.

Primero, la mozzarella cortada en láminas. Después el provolone picante en trocitos y el parmesano rallado. Finalmente, cortamos en cuadrados el queso gorgonzola y lo colocamos por toda la pizza.

De este último queso os recomiendo que no pongáis demasiado, si no la pizza solo sabrá a gorgonzola y no dejará que el resto de quesos tomen protagonismo.

Ponemos el horno a calentar a 220º y, cuando esté listo, metemos nuestra pizza. Lo importante es que la masa se cocine, ya que los quesos se derretirán a los cinco minutos de estar en el horno.

Bajamos la temperatura a 200º y, después de 15 minutos aproximadamente (dependerá de cada horno), comprobamos que la masa está bien hecha y retiramos nuestra pizza cuatro quesos del horno.

Si nos gusta, una vez que sacamos la pizza del horno podemos ponerle por encima un poco de albahaca o rúcula. ¡Y lista para comer!

Receta de pizza de jamón york y champiñones

La pizza de jamón york y champiñones (en Italia llamada pizza prosciutto e funghi) es una de las pizzas más ricas y clásicas. Salvo que no te gusten los champiñones, es una de las pizzas estrella que siempre se repiten; la típica, que le gusta a todo el mundo.

Hoy os traemos una receta especial de pizza, muy parecida a la pizza italiana original y con ingredientes frescos y muy sanos. Podemos prepararla en menos de media hora (si no hacemos la masa en el momento, claro) y nuestros comensales se chuparán los dedos.

Ingredientes para 2 personas:

  • Para la masa:
    • 600 ml de agua templada
    • 1 kg de harina de fuerza
    • 50 gr de levadura de cerveza
    • 30 gr de sal
    • 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
    • 2 cucharaditas de azúcar
  • 80 g de jamón york
  • 80 g de champiñones frescos
  • Tomate triturado
  • Mozzarella
  • Queso Parmesano rallado
  • Sal
  • Orégano
  • Aceite de oliva virgen extra

Lo primero es preparar nuestra masa o comprar una ya hecha. La diferencia entre hacerla nosotros mismo en casa o comprarla en el super es enorme, pero si estáis pillados de tiempo, no os quedará más remedio que usar esta última opción.

Si queréis prepararla vosotros en casa, podéis coger la receta de la masa en este post que os dejamos. Es muy sencilla, lo único es que tendréis que prepararla unas horas antes de hacer la pizza.

Una vez hecha la masa, la estiramos sobre un papel especial para horno, con ayuda de un rodillo o una botella con harina y empezamos a colocar ingredientes.

Para empezar, ponemos un par de cucharadas de tomate triturado en la base de la masa. Añadís una pizca de sal, espolvoreáis un poco de orégano y, por último, un chorrito de aceite de oliva virgen extra.

Cortamos la mitad de la mozzarella en rodajas y la colocamos en la pizza, separadas unas de otras. Calentamos el horno a 220º y horneamos esta parte de la pizza durante 10 minutos.

La sacamos del horno, añadimos la otra mitad de la mozzarella, también en rodajas, y los champiñones frescos. Horneamos cinco minutos más y volvemos a sacar.

Colocamos el jamón york cortado en cuadraditos y espolvoreamos un poco del queso parmesano rallado.

Horneamos durante cinco minutos más, fijándonos sobre todo en que se termine de hacer por abajo y que la parte de arriba no se queme.

Retiramos del horno, dejamos enfriar un poco y ¡servimos!

Cómo preparar masa de pizza casera

Si eres un apasionado de la cocina italiana y quieres aprender a preparar una masa de pizza de forma fácil y sencilla… ¡ésta es tu receta!

Es verdad que a veces preparar masas puede resultar un poco pesado porque hay que amasar mucho; sin embargo, con la masa de pizza no sólo ahorrarás dinero, sino que haciendo un día una buena cantidad puedes congelarla y dejarla para otras ocasiones.

Ingredientes para 4 bases de pizza:

  • 600 ml de agua templada
  • 1 kg de harina de fuerza
  • 50 gr de levadura de cerveza
  • 30 gr de sal
  • 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 2 cucharaditas de azúcar

En primer lugar debemos poner en un bol pequeño la levadura de cerveza echa trocitos y el azúcar. Es verdad que a veces es difícil conseguir la levadura de cerveza fresca, pero en cualquier supermercado la podemos encontrar en polvo, que realmente hace la misma función. Sea como sea, debemos añadir al bol un poco de agua y remover la mezcla durante un minuto.

Después de esto, dejamos reposar durante 5 minutos hasta que se forme una especie de capa de burbujas en la superficie del bol. Mientras esperamos que esto ocurra, en otro bol más pequeño, diluimos la sal en un poco de agua, removiendo para que no queden granos.

A continuación ponemos en un bol grande toda la harina (si puedes tamizarla antes, la masa quedará mucho más ligera) y hacemos un agujero en el medio. Vamos añadiendo el resto de ingredientes uno por uno: primero la mezcla de la levadura de cerveza y el azúcar; después la sal disuelta; el aceite de oliva y, por último, el agua.

El agua debemos ir echándola poco a poco en el bol, mientras removemos con la otra mano para que todo se mezcle bien. Una vez que estén todos los ingredientes unidos y la masa sea uniforme, la sacamos del bol y, en una superficie enharinada, empezamos a amasar siempre procurando dejar aire por el medio, para que la masa suba mejor.

Después de amasar durante 5 o 10 minutos lo último que queda por hacer es dejar reposar la masa. En el mismo bol donde mezclamos los ingredientes metemos la masa y la tapamos con un trapo de algodón. Debemos dejarla ahí al menos dos horas para que suba, en un lugar con poca luz, a temperatura ambiente y sin corrientes de aire.

Cuando pasen las dos horas nuestra masa estará lista y podremos cortarla en 4 trozos, o bien para hacer cuatro pizzas diferentes si tenemos muchos invitados, o bien para congelarlas por separado para otras ocasiones. ¡Buon appetito!

Cómo hacer pizza vegetal

La pizza es uno de los platos más ricos y típicos de la cocina italiana. Se calcula que su origen se remonta al siglo XVII y, desde entonces, lleva alimentando estómagos y siendo la comida preferida de muchos niños y mayores.

Con su base  de harina y levadura y sus infinitas combinaciones de ingredientes, hoy os presentamos un tipo de pizza que, sin duda, triunfará entre vuestros amigos y familia: la pizza vegetal.

Ingredientes para 4 personas:

  • 1 masa de pizza grande
  • 1 bote de tomate triturado
  • 1 berenjena
  • 1 calabacín
  • 1 pimiento rojo
  • 1 cebolla
  • 1 patata
  • 1 mozzarella
  • 1 bolsa de queso rallado
  • Aceite de oliva
  • Orégano
  • Sal

Lo primero que tenemos que hacer para empezar nuestra pizza es tener preparada una masa de pizza de aproximadamente 300 gramos.

Para este paso tenemos dos opciones: comprar la masa de pizza fresca o congelada en el supermercado, o hacerla nosotros mismos siguiendo los pasos para hacer masa de pizza casera como os explicamos en este otro post.

Una vez tengamos preparada y extendida nuestra masa, debemos ponerla en una placa de horno, siempre encima de un papel especial para no manchar demasiado y no tener que limpiar después. Precalentamos el horno a 180º mientras hacemos el siguiente paso.

Con la ayuda de una cuchara, extendemos un poco de tomate triturado por encima de la masa hasta que quede una capa uniforme, procurando dejar los bordes sin manchar. A continuación, echamos un chorrito de aceite de oliva virgen y espolvoreamos una pizca de orégano.

Cuando acabemos, el horno ya estará listo para que metamos nuestra pizza. Es importante hornear la masa con el tomate para que se fijen los ingredientes; con tres minutos será suficiente.

Para seguir, tenemos que preparar el resto de los ingredientes. Primero, debemos pelar y picar la patata, en cuadraditos pequeños. Para que no quede muy cruda, podemos darle un toque en la freidora antes de ponerla sobre la pizza.

Cortamos los pimientos y la cebolla en tiras, la berenjena con el corte que más nos guste y el calabacín en cuadrados, igual que la patata. Cortamos la mozzarella encima del tomate y la masa y comenzamos a colocar el resto de los ingredientes por encima, de la forma que prefiramos.

Finalmente, añadimos un poco de sal, espolvoreamos un poco de queso rallado encima de las verduras y metemos la pizza en el horno a 200º durante 10-15 minutos (dependerá, como siempre, de nuestro horno).

Como consejillo final, cuando la pizza esté lista, debéis sacarla del horno y ponerla sobre una rejilla o una superficie con agujeros; así soltará la humedad que tiene y la masa estará más crujiente. También podéis coronar la pizza con un chorrito de aceite de oliva o con un poco de pimienta negra. ¡Y a comer!